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SER COLOMBIANO

             PORFIRIO BARBA JACOB
Nacido en Santa rosa de Osos, (...),emigró. A México, que gozaba del prestigio de la revolución.
(...)
Durante años, Porfirio fue un famoso poeta  mexicano.
(...).
Tenía una  mirada, en unos ojos pendencieros, que daba miedo. Insolente y altivo parecía hecho para imponer lo que le daba la gana...
(...)
Porfirio era como era, Vagabundo y transhumante escribía unos poemas que, cuando se leen, no se olvidan jamás.
(...)
Laureano Gómez, para conmemorar la muerte de Barba Jacob, escribió la diatriba que presentía Barba Jacob cuando se fue a México. el título era. Barba Jacob, un Degenerado. Terminaba así: "Descubierto el maldito e inmundo sentimiento que inspira el libro, sólo sigue arrojarlo a la basura porque es indigno de figurar entre las lecturas de personas normales y decentes."
(...): era una llama al viento y el viento la apagó..."
EL POETA HABLA DE SÍ MISMO

    LA DIVINA TRAGEDIA
¡Vivir e esforzarse! como vibra el ímpetu solar en el rayo de la aurora, en esta exclamación que tiene la más alta tónica de mi espíritu, está la virtud que me representa en el coro de los poetas: ¡Vivir es esforzarse! Yo he sido el esfuerzo de la intuición anhelante, sin desfallecimientos,semirrevelado, semivelado, que ora se exalta, oras desconfía de sí mismo, viajero del llano al alcor, del alcor a la montañuela, y cimera ésta, en un impulso más potente, a la cima azul; sobre la cima azul, la nieve incorruptible.
(...)
Allá en mi nativa Antioquia y en su más áspera porción, donde el cura melifica y amenaza, las madres procrean hijos como la caña de maíz granos, y la civilización es dulzura sin inventos, amor al prójimo sin automóviles, obras de misericordia sin locomotoras, castidad sin cinematógrafo; y donde la belleza y el vigor, la salud moral y la esperanza, la inteligencia y la lealtad son como flores caídas del mano de Jesucristo...
Allá en mi Antioquia, donde acaso pasó junto a mí, sin que yo lo advirtiera, el espíritu de Jorge Isaacs, y donde he opido en noches de luna coros de peones,
               cantando a todo pecho la guabina,
               canción sabrosa,dejativa y ruda;
               ruda cual las montañas antioqueñas
               donde tiene su imperio y fue su cuna...
 (...)
Además,yo tenía ya una conciencia clara de mi personalidad, de mis derechos a la vida, a los mejor posible de la vida según mis fuerzas. Un sentimiento que ahora traduciría yo con insustituibles palabras de Valle-Inclán:"Yo soy el chivo y ésta mi montaña!" La montaña era para mí la vida.
(...)
Después de la guerra fui maestro de escuela en Angostura...
(...)
En aquel grupo, palpitante de ilusión, la floridez de la mañana, el asombro de la inteligencia recién venida que está descubriendo a la vez el mundo del limo y el mundo del alma, en donde es necesario dar una distribución adecuada a los fenómenos... En aquel grupo leía yo a Darío y a Valencia, a darío y a Emerson, a Valencia y a Cervantes, a darío y a Carlos Marx, a Valencia y a Edgard Quinet...
(...)
El campesino que había en mí se asustó con el estruendo de la capital mexicana, y me encamine a Monterrey.
(...)
Entré al periodismo, y rodando, rodando, he venido hasta la capital, esto es, el alto periodismo.Ya sé su secreto; lo aprendí pocos días después de llegado a Monterrey. Consiste en escribir muchos artículos cortos con desenvoltura comedida, opinar sobre todos los temas que uno no conoce, saber ponerse romántico todos los días de distinto modo, confesarle horror a la verdad,y urdir todos los días pequeñas trampas donde caigan los lectores ingenuos, que aún quedan algunos. 
(...)
Y yo me iba diciendo:"No importa! ¡Esos son esfuerzos! ¡Vivir es esforzarse!"
(...)
he aquí lo que quiere nuestra generación literaria.
Pero un alma de hombre sano cantando a la vida en la alegría mística de la Naturaleza, a grito abierto; o cantando su horror lúgubre, cruzado de relámpagos de muerte....Un hombre-hombre, es decir, carroña de carroñas, cantando la tristeza hórrida de su llaga, haciendo brillar sobre la podre la luz divina de su voluntad en su talento...Un ebrio de la gloria de Simón Bolívar...
(...)
quise fijar en palabras, en canciones, en raptos de la palabra iluminada este glorioso despertar de mi alma;pero las palabras adquirían tal personalidad, se individualizaban y eriguían de tal modo, que no se dejaron atar con los lazos de seda del discurso...
(...)
Mi poesía es para hechizados. Aunque se manifiesta generalmente con una apariencia de tranquilidad, está llena de temblores, de relámpagos, de aullidos. Hay que desentrañarla, no en la complejidad de sus pensamientos, sino en la complejidad de sus emociones. Parece celebralizada: no lo es. Yo soy hombre de tono profundo, y no producto al por mayor de la naturaleza.
(...)
¿Y sin contamos las conquistas logradas para nuestro derecho? Bolívar define con el Discurso de Angostura y la Carta de Jamaica la unidad de la raza, como la define Saturnino con los lienzos de sus ofrendas. el libertador señala con antorchas de fuego los lineamientos de nuestra sociología. Como Santander en Colombia, aunque es difícil que con tal suma de talentos flamígeros, otros capitanes de América organizan los pueblos que les toca regir. Las nacionalidades se cimientan, la patria logra su primera encarnación formal. Ya la rapiña del 47 suscita enconada protestas, y todos los corazones se vuelven hacia México.

(...)
Es preciso recordar esta certidumbre consoladora:mientras la guerra civil parece devorarnos los riñones,y los cepos calcinados del odio cubren de nubes pestíferas el ambiente, y la sangre gotea con un gluglú desolado, los espíritus más conspicuos del Continente recogen lo esencial de la cultura europea
(...)
yocreo -y expreso mi creer, para sublimarlo, con palabras de Valle Inclán, gran maestro- que la onda cordial de una nueva conciencia sólo puede venir de las liras-
(...)
No hay pesadumbre, por ruda que sea, que no se disipe cuando asoma sobre la paz de los campos la estrella de la arde.

¡Aurora! ¡Aurora" Hoy he advenido en medio de los hombres por la virtud de mi canto, que fija mi dolor y mi esperanza. Soy el príncipe fatuo de la rima, el príncipe llagado, pero fatuo, el príncipe ciego, pero fatuo...Seré tema de conversación, de censura, de elogio inteligente para quienes no lograrán comprender....seré errabundo...Seré desmesurado...envejeceré en el noble ejercicio de la lira y en el amargo ejercicio de un trabajo sin idealidad...Se me rechazará al fin de los periódicos...Iré a los hospitales como Verlaine...después un viento...un viento...un viento... y en ese viento mi alarido."
PORFIRIO BARBA JACOB
OCTUBRE, 6 DE 1.920"

Espero confiado que este blog sea de su agrado, soy admirador de  ese gran poeta que tuvo que refugiarse  fuera de su país como hoy en día  les ha tocado a 8 millones de colombianos.
¡OH VIENTO DESMELENADO...!
¡Oh viento desmenelado
que rompiste la arboleda:
ya que nada, si viví,
he fundado ni ha durado,
llévate aún lo que queda:
llévame a mí!  "



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